con cada lágrima que derraman.
Quiero que el silencio desaparezca,
que entre nubes flote mi pena.
Ahuyentar tus fantasmas
que no quieren verme respirar.
Se me acaban las historias,
mientras cuento cada gota.
Mi cabeza sobre la almohada
y otra pena mal hablada.
Mientras ella cuenta las estrellas
yo me reencuentro con sus recuerdos.
Consigue seguir adelante,
yo me desaparezco de sus pensamientos.
La sensibilidad se le ha escapado,
y cada poro se le ha cerrado.
¿Cuándo me dejará entrar?
Y cada vez que pronuncio su nombre
ante mi espejo sin reflejo
me acompaña su desprecio.
Y por fin logro sentirlo,
el aroma de su cuerpo descompuesto.
Ya no está conmigo
tampoco se halla en compañía,
solo algunos gusanos
aprovechan sus últimos encantos."
Carolina Franco Bitancurt-
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